EXPERIMENTO: FUEGOS DE COLORES
Materiales:
-
Ácido bórico.
- Alcohol.
- Hilo de cobre (se puede sacar de cables de teléfono).
- Acetona.
- Un mechero o encendedor.
- 3-4 recipientes de aluminio pequeños (los que contienen las velas, por ejemplo).
Procedimiento:
- Alcohol.
- Hilo de cobre (se puede sacar de cables de teléfono).
- Acetona.
- Un mechero o encendedor.
- 3-4 recipientes de aluminio pequeños (los que contienen las velas, por ejemplo).
Procedimiento:
Dependiendo
de los materiales de los que dispongamos, utilizaremos hasta 4
recipientes metálicos. En el primero echaremos un poco de ácido
bórico. En el segundo, hilo de cobre. En el tercero, alcohol,
y echamos también unas gotas en los dos anteriores. En el último echaremos acetona.
Antes de encenderlos, es importante limpiar bien los restos de las sustancias que hayan podido quedar por la mesa o en nuestras manos, e incluso por el exterior de los recipientes. Una vez limpio, procedemos a prenderlos. También es recomendable tomar las medidas de precaución adecuadas como por ejemplo tener a mano una botella de agua.
Antes de encenderlos, es importante limpiar bien los restos de las sustancias que hayan podido quedar por la mesa o en nuestras manos, e incluso por el exterior de los recipientes. Una vez limpio, procedemos a prenderlos. También es recomendable tomar las medidas de precaución adecuadas como por ejemplo tener a mano una botella de agua.
Explicación:
Este experimento es otro ejemplo del efecto de la presión atmosférica.
En el interior de la botella, aunque no lo veamos, hay aire. Cuando inflamos el globo, el aire que hay en la botella sale por el agujero inferior. En cambio, cuando tapamos el agujero, se produce un vacío y la presión atmosférica exterior, que es mayor que la interior, impide que el aire salga y, por tanto, el globo no se desinfla
En el interior de la botella, aunque no lo veamos, hay aire. Cuando inflamos el globo, el aire que hay en la botella sale por el agujero inferior. En cambio, cuando tapamos el agujero, se produce un vacío y la presión atmosférica exterior, que es mayor que la interior, impide que el aire salga y, por tanto, el globo no se desinfla